A LA
STMA. VIRGEN DEL PRIMER DOLOR
A Paco Ramón y Mari Ángeles
que me han demostrado ser
amigos de sus amigos…
Mil saetas
abren los cielos
rezándote
en su cantar,
y son la
luna el tambor,
garganta del corazón.
Los olivos
eran desvelos
de óleos
mirando ciegos.
Jesús,
presiente de Judas,
el beso que
ha de venderlo.
¡Hay Jesús
al paso del Prendimiento,
llévame
Señor contigo
que en este
esparto violento también
llevan
preso al mundo!
- Jesús me
miró, y en silencio
se perdió
entre bruma… -
De blanco
raso San Juan,
va meciendo
su palma,
lleva el
ceño fungido
presagiando
del Maestro su martirio.
Yo, camino
tras sus pasos
mis ojos son dos llanto
que riman en tu mirada
donde en tu
pecho la daga,
parte en
dos tu corazón
Reina y
Madre California
¡Ay, Virgen
del Primer Dolor!.
Tu vas
meciendo la vida
rojo manto
de pasión
del cielo
eres la puerta
camino de
salvación.
Dicen Madre
del Primer Dolor
que el
miércoles santo nacieras
para alumbrar
el amor,
las calles
de Cartagena.
- Y también
me contaron, Madre,
que de tu
dolor brotó el llanto,
perlas de
nácar ungidas
donde
expresar hacia ti mi devoción.
Con estas
humildes manos,
con esta
voz que te implora,
después de
cantar la Salve
quiero
abrazarte Madre
con
palabras que dibujan
por el
cielo mis romances,
donde
varada la luna
ilumina la
belleza de tu imagen.
En Santa
María la nueva,
cuando ya
te recoges
las
columnas son de Ave María
las
vidrieras mi corazón,
de este
humilde poeta
que trenza
diademas de versos
de azahar,
lirio y romero,
para
decirte abonico lo que brota de mi pecho.
Eres el
jardín celestial,
donde mi
corazón asido al tuyo
se torna
angelical semblanza
cuando la
aurora en tu cara
alumbra de
amor la tierra.
¡Madre del Primer Dolor!
Eres del Miércoles
Santo
rosa roja
de pasión!.
Antonio Navarro Zamora